Masajes en Barcelona

¿Qué es el masaje y para qué sirve?

Un masaje es una técnica de contacto con las manos en la que se aplica presión y se manipula la musculatura y otros tejidos blandos. En algunos casos, según la técnica que se emplee, la presión se aplica con los antebrazos, con los pies o con los codos. El masaje es una de las técnicas terapéuticas más extendidas y popularizadas entre casi todas las sociedades del mundo.

En este sentido, un masaje terapéutico es aquel que encadena un conjunto de maniobras y manipulaciones encaminadas a prevenir, recuperar y mantener el cuerpo en buen estado o en estado de relajación.

Solemos referirnos a “masaje” como un conjunto de maniobras realizadas por un/a masajista donde se incluyen presión, fricción, manipulación y amasamiento sobre la piel, los músculos, los tendones y/o los ligamentos. De esta forma, su intensidad puede variar mucho, yendo desde el tacto suave hasta la presión intensa y localizada.

Por lo tanto, el objetivo del masaje es liberar las tensiones de la musculatura y reafirmar los tejidos blandos y las articulaciones. Los masajes tienen un efecto tonificante que relaja y favorece la circulación sanguínea y linfática. De este modo se consigue no sólo reforzar el equilibrio natural del cuerpo, sino también eliminar toxinas.

El masaje es posiblemente una de las técnicas de sanación más viejas de la humanidad. Como consecuencia, se encuentran numerosas referencias en culturas y civilizaciones tan distintas como la egipcia, la china, la hindú, la griega o la romana.

¿Qué tipos de masaje existen?

Existen varios tipos de masajes. De hecho, distintas culturas suelen tener distintas preferencias y hábitos en las técnicas de masaje. No obstante, en términos generales, algunas de las variantes más comunes son:

• Masaje relajante: El masaje relajante se fundamenta en el encadenamiento de maniobras superficiales donde la presión y la fuerza empleada es suave y ligera. La cadencia y el ritmo de los movimientos suele ser lento y reiterativo, por lo que suele generarse una relajación general de los músculos gracias al contacto pausado, repetido y constante. Este es el masaje más solicitado en casos de estrés o cuando se quiere relajar el cuerpo y la mente.
• Masaje descontracturante: Este tipo de masaje se centra en las partes de la musculatura que hayan podido sufrir tensiones por un sobreesfuerzo, mala posición, lesión o un trabajo excesivo. La misión del masaje descontracturante es liberar la tensión acumulada y recuperar un estado de normalidad en la musculatura.
• Masaje sueco: Este tipo de masaje suele incorporar movimientos largos, profundos y circulares. Puede incluir ligeros golpes o vibraciones, y proporciona una sensación de relajación y tonificación general. En términos de presión e intensidad se suele ubicar entre el masaje relajante y el descontracturante.
• Masaje profundo (deep tissue): Este tipo de masaje aplica movimientos más lentos y más fuertes que los anteriores. Su misión es tratar de trabajar sobre los tejidos más profundos de músculo, de ahí su nombre. Con frecuencia, se aplica en casos en los que el paciente ha sufrido lesiones y cuando es necesario reparar el daño muscular, aunque hay personas a las que les gusta este tipo de masaje por la notable presión que se aplica.
• Masaje deportivo: Normalmente incluye manipulaciones y maniobras parecidas a las aplicadas en el masaje sueco. No obstante, se tiende aplicar un grado más elevado de presión y de fuerza. Está especialmente recomendado para las personas que practican actividades deportivas y quieran prevenir ciertas lesiones causadas por la sobrecarga o bien tratar algunas lesiones.

¿Qué beneficios tiene el masaje?

La fricción y la manipulación que se genera a través de un masaje tiene principalmente un efecto relajante. Asimismo, también se favorece el crecimiento de las células. Las maniobras y la presión favorecen el flujo sanguíneo. En el fondo, la finalidad de todos los masajes es proporcionar bienestar a través de la reducción de la tensión muscular que, como hemos dicho, puede tener su origen en sobrecargas, sesiones de ejercicio intenso o malos hábitos posturales.

¿Cuál es el mejor masaje?

No se puede decir que haya un mejor masaje como tal, sino que todo va acorde con las preferencias de cada uno/a. Sin embargo, entre los masajes que tienen más popularidad están el masaje relajante, el masaje descontracturante y el masaje sueco. Pese a tener distintos niveles de presión entre ellos, todos resultan agradables.

Si no tienes experiencia previa con los masajes pero estás considerando darte uno y no tienes dolencias localizadas, en Colby Wellbeing te sugerimos que optes por el masaje relajante.  

Si tienes algún tipo de contractura, si tienes estrés, sufres de la espalda, padeces tensiones involuntarias en la musculatura o bien tienes mala circulación, entonces te recomendamos que optes por un masaje descontracturante u otra opción que se ajuste a tus preferencias en función de la presión. No dudes en comentarlo con nosotros para que podamos ajustar el tratamiento a lo que más te convenga.

En cualquier caso, siempre que vengas a hacerte un masaje en Colby Wellbeing, los efectos serán notables y evidentes, proporcionándote una sana sensación de relajación, eliminando la tensión muscular y mejorando la circulación sanguínea.

¿Cómo saber si necesitas un masaje?

Un masaje puede ser algo hedonista e indulgente, es decir, algo que decidimos hacer porque queremos, sólo por la sensación de relajación y bienestar que produce.

No obstante, como hemos dicho anteriormente, el masaje tiene propiedades preventivas y/o curativas y puede ser especialmente apropiado si tenemos alguna zona del cuerpo adolorida, o cuando sufrimos una tensión muscular fruto de un sobreesfuerzo. A veces podemos notar una contractura, limitación en la movilidad o cierto nivel de hinchazón… en estos casos un masaje también acostumbra a ser el aliado perfecto para recuperar el bienestar y aliviar tensiones.

¿Qué efectos tiene un masaje terapéutico?

Con los masajes terapéuticos conseguimos trabajar sobre la musculatura u otros tejidos blandos. De esta forma podemos aliviar contracturas ocasionadas por malos hábitos posturales, por tensión acumulada o por falta de elasticidad.

Los masajes más enérgicos consiguen un efecto más penetrante, llegando a las capas y los tejidos más profundos de la musculatura. Las manipulaciones más suaves tienen un efecto relajante y generan bienestar.

En Colby Wellbeing estaremos atentos a tus indicaciones y realizaremos un masaje que se ajuste a tus expectativas. Con nuestros masajes conseguiremos generar un estado de bienestar y relajación en el cuerpo que son imprescindibles para afrontar cada día de forma saludable y con un estado físico óptimo.

¿Cuál es la diferencia entre masaje relajante y descontracturante?

La diferencia entre estos dos masajes reside en la presión y en el foco donde se realizan las manipulaciones. El masaje descontracturante se hace para liberar la tensión acumulada en una zona del cuerpo, de ahí que las maniobras se centren en una parte concreta de la anatomía, por ejemplo en la zona cervical.

Por otro lado, el masaje relajante genera una sensación de bienestar y relax general en todo el cuerpo, por lo que no se centra en una zona en concreto.

En el masaje relajante se suelen emplear maniobras más lentas y de menor presión buscando la harmonía y la reiteración. Un nivel de presión menor genera relajación. Por el contrario, en masaje descontracturante se masajea una zona más concreta para aliviarla o liberarla de tensión, y eso con frecuencia requiere un nivel de presión más elevado y focalizado. 

Si tienes dudas de qué masaje te conviene más, no dudes en preguntarnos: En Colby Wellbeing te aconsejaremos a partir de lo que necesites.

En cualquier caso, y si te sirve de inspiración, nuestros masajes más solicitados son:

• Para un momento de paz: Masaje relajante
• Para zonas concretas: Masaje descontracturante
• Especial cabeza y cervicales: Masaje Craneofacial
• Alivio de espalda: Masaje de espalda
• Para seguir con buen paso: Masaje de pies